INMINENTE ARRANQUE DE SU NUEVA FÁBRICA EN VILLAFRANCA DE LOS BARROS.
Con unos ingresos de 7 millones de euros en el primer semestre de 2023, Portico Sport ha logrado superar la facturación total alcanzada en 2022, que se situó exactamente en 7 millones de euros. Según el consejero delegado de la compañía, Sergio Tello, las claves de ese crecimiento se hallan en el despertar del pádel en Centroeuropa y Reino Unido.
Las previsiones de Portico Sport son cerrar 2023 con más de 500 pistas de pádel instaladas y sobrepasar los 14 millones de facturación, un 100% más que en 2022. Esta compañía extremaña fabricante de pistas de pádel y cubiertas deportivas desde el año 2010, obtiene el 95% de sus ingresos con las exportaciones que realiza a más de 35 países de todo el mundo.
Según destaca Tello, actualmente el negocio de la empresa se concentra especialmente en países europeos como Reino Unido, Alemania, Bélgica, Holanda, Suiza, Francia o Italia, en los cuales la práctica del pádel está despuntando tras superar el período de asentamiento inicial.
A la par, Portico Sport tiene sus miras puestas en otros mercados como América Latina, Estados Unidos y Canadá. Paralelamente, la compañía trabaja en países de todos los continentes; actualmente, por ejemplo, se encuentran instalando en Nueva Zelanda la primera pista de pádel para ese país.
SOCIEDAD DEL HOLDING FAMILIAR DE MALDONADO
En octubre del año pasado, el inversor español José María Maldonado adquirió, a través de su Family Office, el 70% de las acciones de Portico Gestión e Ingeniería, empresa propietaria de la marca Portico Sport. Maldonado fue el fundador de Bridgepoint, uno de los primeros fondos de inversión europeos en entrar en el sector deportivo, con la compra de la empresa española Dorna Sports, S.L, la propietaria de MotoGP.
Tello señala que la entrada del holding familiar de Maldonado ha aportado, por una parte, una gran capacidad económica para abordar el proceso de expansión de la compañía con mayor seguridad. Por otra parte, añade, ha mejorado la estructura de gestión, con la incorporación de destacados profesionales como la nueva CFO, Rosa Martínez, o el nuevo director de desarrollo de negocio, Guillermo Maldonado.
NUEVA FÁBRICA OPERATIVA EN JULIO
Portico Sport iniciará el próximo 1 de julio la producción de sus pistas de pádel en su nueva fábrica en Villafranca de los Barros, localidad situada al sur de la ciudad de Mérida. Las instalaciones disponen de 4.500 metros cuadrados, en una superficie total de casi 8.000 metros. El desarrollo de esta operación, iniciada el pasado 2020, ha supuesto una inversión de 2,2 millones de euros.
La nueva planta fabril incorpora una celda robótica de soldadura y una planta de lacado automático, mejoras que, según Tello, “permitirán fabricar más, con menor coste y con mayor calidad”. La capacidad de producción pasa a ser de 2.000 pistas al año.
Por otra parte, la compañía mantiene en el polígono industrial El Prado, de Mérida, la fabricación de cubiertas deportivas. En esa ubicación, la empresa continuará disponiendo de 2.200 metros cuadrados distribuidos en dos naves de su propiedad, mientras que dejará el alquiler de otras cuatro naves, al haber sido trasladada la producción de pistas.
“EXPECTATIVAS TREMENDAS” EN ESTADOS UNIDOS
Para este año 2023, Portico Sport había calculado inicialmente la instalación de 25 pistas de pádel en Estados Unidos. Tello prevé que serán más, dado que a día de hoy ya han cerrado contratos para 15 pistas. El directivo tiene unas “expectativas tremendas” para ese país, donde el pádel “se encuentra en fases iniciales, pero con un desarrollo exponencial”. Tello prevé que en 2024 puede producirse el despegue del pádel en Estados Unidos, con unos años de gran crecimiento a partir de 2025.
Respecto a la posible competencia que pueda suponer la fiebre que vive el pickleball en el mercado norteamericano, el directivo considera que, en realidad, va a representar una ayuda para la expansión del pádel. Según sostiene, ya hay clubes de pickleball instalando también pistas de pádel. Asimismo, indica que se produce “una permeabilidad entre jugadores de los dos deportes, siempre a favor del pádel, es decir, de jugadores de pickleball que se pasan al pádel”. Tello concluye que “el virus del pádel está creciendo dentro de los clubes de pickleball”.
